“Generalmente, cuando te decepcionas, te vuelves más fuerte.”  -David Rudisha-

Todos de una manera u otra pasamos por decepciones o desilusiones.

¿Pero con cuáles te quedas toda tu vida? Con las que te hieren el corazón, con las que te hieren tu orgullo, con las que te hieren tu personalidad…

A veces nos decepcionamos por las cosas más simples como por ejemplo sacar una “C” en un examen en vez de una “A”, que es a lo que nos acostumbran desde niños, en vez de decirnos que una “C” no es una mala nota pero que hay espacio para mejorar. Pero de eso entiendo que se trata la vida no?, de crecer, de madurar, y mientras más maduras tu lista de decepciones se vuelven un poco más compleja y un poco más grande. De sacar una simple “C” (que no esta mal), a que algo te salga mal, a que tuviste una mala experiencia con un trabajo o una persona. Las decepciones las tendemos a medir por el dolor que nos hacen sentir en el momento en que suceden o el dolor que nos sigue causando mientras pasa el tiempo. Nunca sabes cuando algo o alguien te va a decepcionar, muchas veces lo predestinamos y eso hace que nos decepcionemos mas. Pero cuando algo te toma de sorpresa ahí es que nos marca, ahí es que nos define como personas.

Siempre tendemos a cambiar después de una decepción aunque sea un poco pero muchas veces irreversibles.

Las decepciones relacionadas a nuestro corazón son verdaderamente duras (Creo que todos hemos pasado por una). Muchos de nosotros no conseguimos superarlas y nos cerramos al amor para no volver a sentir esa decepción, ese dolor. El año pasado pase por una de las decepción amorosas mas fatales que he podido aguantar, todavía es la hora en que me duele por ciertos factores. La pregunta es: ¿Deberíamos cerrarnos del todo y de todos por el fracaso de una relación amorosa? ¿Vale la pena cerrarnos en tanto dolor sabiendo que nos hacemos daño nosotros mismos? (Cuando tenga la respuesta se las diré) Pero algo que si se es que esa decepción, ese dolor te hará mas fuerte, mas paciente y sobre todo mas sabio.

Otra decepción que nos duele, y mucho, es la traición. Imagina que tienes un mejor amigo o varios, puedes tener mas de uno, una persona al que le confiabas tus problemas, tus alegrías, esa persona que era como familia para ti y de la nada todo acabe. El dolor que causa una decepcionante traición es uno bien difícil de lidiar. Aunque ya sea de un amigo, ser querido o familiar, una traición siempre va a ser dolorosa. Pase por un episodio en que me sentí traicionado por mis amigos y sinceramente uno siente desconfiado e inseguro y sobre todo solo. Lo ideal después de algo así es que uno no se cierre a la llegada de personas nuevas en nuestras vidas, pero seamos realistas uno termina bien molesto con todo, que a veces no quieres saber ni de tus propios pensamientos. La tristeza y la ira son cosas peligrosas que arropan todo. ¿Pero saben algo? Es solo una etapa, si, ya esas personas no estarán en tu vida y te dolerá de vez en cuando, pero eventualmente te sentirás mejor.

Termino con decirles que no hagan lo que yo hice después de ambas decepciones corridas, primero la amorosa y luego la traición todo en menos de un año. No se cierren dentro de ustedes, busquen el cariño necesario para sanar esas heridas, no terminen odiando todo y a todos. Realmente necesitamos confiar de otras personas para sentirse bien. De lo contrario terminamos en actitudes y acciones negativas para nosotros. Nuestra lista de decepciones es algo que nunca va a acabar, esta en ti ver que añades y que no.

Por favor no piensen que soy un “experto” en el tema. A mi me falta mucho por sanar todavía. Recordemos que hay un mundo maravilloso, y personas también, al que le estamos dando la espalda sin ningún motivo. (Yo reconozco esto aún dándole la espalda al mundo)

Hasta la próxima.

-Vitin-

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